La mensajería instantánea es un método rápido y barato de comunicación que ha formado parte de Internet desde sus comienzos. Puede que ya conozcas sistemas de mensajería online como el de Yahoo Messenger o los protocolos de AOL, pero puede que todavía no hayas oído hablar de XMPP. El protocolo XMPP es el que sirve a Google Talk y al chat de Facebook, por ejemplo, además es gratuito y de código abierto.

Como XMPP es un estándar abierto, puedes implementarlo en tu servidor y disponer así de tu propio sistema de mensajería instantána. Esto no significa que tengas que competir con AOL, Google o Yahoo, claro, pero significa que tu organización tendrá las herramientas para crear y usar un sistema interno de comunicación entre trabajadores.

Hay más una docena de aplicaciones para servidores que corren sobre el protocolo estándar de XMPP. Algunos de estos programas son de pago, y otros son gratuitos y pueden ser implementados con muy poco esfuerzo. XMPP soporta transmisiones encriptadas también, así que tus comunicaciones y mensajes se mantendrán en privado. Además, también soporta transmisión de voz y otros tipos de datos que te permitirán mejorar la experiencia de las comunicaciones online. Los protocolos XMPP están definidos en XMPP Standards Foundations.

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Un servidor dedicado no administrado es casi como tener el hardware de un ordenador y no usarlo. Aunque dispongas de todos los elementos para poder llamarlo “servidor”, hay muchas funcionalidades que podrías añadir. Algunas de ellas son gratuitas y de código abierto, mientras que otras no lo son. Es importante que sepas esto antes de obtener un servidor dedicado, ya que debería formar parte del producto final.

Una buena compañía de hosting Web te ofrecerá una lista de funcionalidades extra que tienen disponibles, incluidos los precios. Por ejemplo, aquí tenemos un listado de funcionalidades realmente interesantes:

1. cPanel u otro panel de control
2. Certificados SSL
3. Direcciones IP adicionales
4. Protección antivirus para servidores de correo
5. Almacenamiento de Backup rutinario
6. RAM adicional
7. Discos duros adicionales
8. Windows Server 2008
9. Ancho de banda/transferencia de datos adicional

Una forma muy sencilla de evaluar la velocidad de tu página Web en la peor de las condiciones es acceder a ella desde el ordenador más primitivo y lento que puedas encontrar en la faz de la Tierra. Encuentra una máquina con la conexión a Internet más barata de la Historia y pon tu Web a prueba. Cómo ya sabes, cuantas menos imágenes y animaciones tenga tu página, más accesible será para todo el mundo.

Si vives en un lugar “demasiado” civilizado, es probable que no sea precisamente fácil acceder a un ordenador tan lento, así que puedes utilizar una herramienta de testeo de velocidad como iWebTool. Está aplicación es capaz de medir hasta 10 dominios diferentes a la vez. Otra opción es Pingdom, este programa tiene un método de testeo que examinará la totalidad de la página Web, y te informará de el tiempo requerido para la carga de cada elemento de su contenido, ¡incluidas las imágenes! Así podrás saber si vale la pena eliminar alguna imagen que resulte demasiado “pesada”.

Aunque todas las opciones que hemos visto son buenas, si tienes tiempo no te conformes con probar sólo una de ellas. Compara los resultados de ambos programas sobre la velocidad de conexión de tu página Web, y así estarás realmente seguro de los cambios más adecuados.

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