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La popularidad de Twitter ha llegado hasta niveles insospechados.
El mismísimo Papa Benedicto XVI acaba de abrir cuenta en Twitter.
La cuenta en cuestión es @Pontifex, y suma 1.456.000 seguidores a la hora.
De momento el papa no ha empezado a tuitear pero el Vaticano ha asegurado que lo hará en las próximas semanas.
La presencia del Papa en Twitter se enmarca en la estrategia del Vaticano de llevar la Iglesia en la red y que esté presente en el entorno virtual.
Con la entrada en Twitter el Vaticano espera aumentar su visibilidad e importancia y que los mensajes sean compartidos y debatidos tanto por los creyentes como por los que no profesan la fe católica. Con ello también se pretende reflejar que la Iglesia, más allá de predicar “una verdad”, desea escuchar a los otros,
El nombre Pontifex (Pontífice) se eligió por su significado etimológico “constructor de puentes”, y porque el resto de nombres del Papa ya estaban en uso, por lo que no quedaba otra.
Desde la Santa Sede ya se ha dicho que Benedicto XVI no tuiteará con frecuencia porque suele estar muy ocupado y cada tuit requerirá de su expresa aprobación.
Los responsables también aseguraron que el Papa no devolverá tuits, es decir, no seguirá a ningún perfil más que a sus propias cuentas en otros idiomas, de cara a evitar que nadie se sienta despreciado o atacado.
Esta estrategia comunicativa digital tiene como objetivo estar presente en el nuevo espacio cultural virtual en internet que se produce básicamente en las redes sociales.
Ante el debate sobre si la presencia en Twitter del Papa puede desvirtuar el mensaje evangélico, en el Vaticano tienen claro que el objetivo es llegar al mayor número de personas posible.
